domingo, 30 de marzo de 2014

Esta vez, lo absurdo tiene ojos verdes.

Y aquí me hallo otra vez, con más de un año de diferencia desde la última vez que escribí aquí. Parece mentira todo lo que han cambiado las cosas y lo poco atenta que he estado a dichos cambios hasta que no me estallaron en la cara. ¿Estaremos predestinados a acabar con alguien, aunque jamás de los jamases te lo hubieses planteado? Es esa persona que sabes que siempre ha estado ahí, pero que ni en un millón de años pensarías en él como una posible pareja. Pero algo ha sucedido, algo ha hecho que te pares, que frenes y te ha hecho verlo, y una vez que lo has hecho echas un vistazo al pasado y empiezas a entender las pequeñas y sutiles señales que te ha ido lanzando la vida y comienzas a atar cabos. Entonces lo ves. Y una vez lo has visto, tu mente comienza a bombardearte con todo tipo de pensamientos, positivos y negativos. Positivos porque comienza a invadirte la emoción de que por fin hallarás algo de esa felicidad que perdiste hace años. Negativos porque lo conoces, sabes quién es y cómo es, y no puedes evitar sentir miedo por caer en el misma trampa que te hizo tanto daño. Pero negativos sobre todo porque no sabes si sucederá, que esa es otra. No puedo dar por hecho que pasará, a pesar de los acontecimientos pasados, porque se trata de él y con él nada es seguro. Esto no tiene sentido, él en sí no tiene sentido. Y yo intento buscarle alguna explicación lógica a todo esto que me está pasando, pero no la tiene, y quizá por eso estoy así, confundida y a la espera de algo que seguramente no pasará. Pero bueno, no será nada nuevo, estoy más que acostumbrada a este tipo de emociones.
Aunque, no todo está perdido.. ¿no?

jueves, 22 de noviembre de 2012

Escribe aquí un título.

Empiezo a pensar que sólo vengo aquí para contar mis auténticas penas; mis chorradas, mejor dicho, para luego publicarlas y dejarlas aquí, permanentes, eternas. Y así hasta la próxima vez que sienta la auténtica necesidad de escribir y de ordenar mis ideas, como he solido hacer hasta ahora.
Con esto no quiero hacerme la tía súper madura avergonzándose de lo que ha ido escribiendo, no.
Vengo para, tal y como he dicho antes, escribir una vez más.

En realidad lo que estoy a punto de contar es tan típico como lo que he ido publicando hasta la fecha, puede que incluso más.
Actualmente estoy pasando por una etapa de estabilidad, con mis estudios y mis amigos, punto.
Pero la cosa no es tan simple como parece.
Hace meses, en junio concretamente, salí con uno de ellos, pero  no salió bien. ¿Por qué lo hice? No lo sé, supongo que quería saber qué era estar con una persona que no fuese Dani. Pero el problema estaba en que en la vida podría haber salido bien, ya que no estaba enamorada de él. No fue una de esas ocasiones en las que uno se enamora repentinamente y sin querer, y sientes ese tirón hacia esa persona, esas "mariposas" en el estómago.
Yo lo elegí.
Quise probar y salió mal.

Afortunadamente pude contarle cómo me sentía realmente y pudimos volver a la normalidad, a ser amigos.
Y seguramente en este punto de la historia os estaréis preguntando qué importancia tiene todo esto si pasó hace meses, qué he podido sacar yo de trágico en todo esto como suelo hacer. Pues para contestar esas preguntas, tenemos que avanzar hasta ahora. Resulta que por fin he encontrado a esa persona que hace que sienta ese tirón del que os conté antes, pero el problema es que también es uno de mis mejores amigos.

Os puedo asegurar que yo no lo elegí, jamás lo hubiera hecho, pero supongo que ahí esta la gracia. Además, estoy segura de que él no siente lo mismo por mí, y el motivo de ello es que él es como yo. Durante mucho tiempo ha estado apartando de su vida a personas que comenzaron siendo amigas suyas pero acabaron pidiéndole ser algo más. Y eso, eso precisamente señores, es lo que he estado haciendo yo hasta ahora.
Apartándolas de mi vida. Pero no siendo directa, como tenía que ser, sino cortando todo tipo de comunicación. Yo soy más radical que él, la verdad.
Realmente merezco que me rechace, que sea una más que tenga que echar, una decepción más. Seguramente sea mi precio a pagar por todo el daño que hice.
Seguramente Dios, el destino, el karma, o como coño queráis llamarlo esté preparando el plan que me merezco: saber qué se siente al ser rechazado por mí.

sábado, 17 de marzo de 2012

Reflexión.

Hoy, 17 de marzo del 2012, vuelvo a escribir. Han ocurrido tantas cosas.. no sabría ni por donde empezar.
Como muy bien supuse en mi última entrada.. ocurrió. Sí, acabé con mi novio.. fue en octubre, hará hoy cinco meses, ja, qué casualidad, no me habia dado cuenta del día que era hoy hasta este instante.
Sinceramente, fue de las peores experiencias de toda mi vida, una puta mierda.
Pero aún me quedaba un clavo ardiendo al que agarrarme, y era que todavía podíamos seguir siendo amigos, o eso me juró él. Según él, cuando las cosas se hubiesen calmado, seguiríamos hablando, quedaríamos de vez en cuando, y cosas así. Aún me pregunto cómo pude ser tan gilipollas al creérmelo. En fin, supongo que en ese momento seguiría enamorada de ese imbécil.
Durante estos cinco meses llegaron otras personas que fueron capaces de ver en mí cosas que por desgracia yo no veía en ellos, y me vi obligada a rechazarlos y en otros casos, a dejar de hablarles, a cerrarme en banda. Sé que hago daño y que soy lo peor, pero no puedo salir con alguien si el sentimiento no es recíproco.
Por suerte he conocido a personas maravillosas que siguen aquí conmigo, personas que cuando estoy con ellas soy capaz de darme un respiro y dejar mi lucha contra mis propios demonios para otro momento.
Pero eso no es suficiente.
Y me aterra pensar que el motivo por el que me siento tan vacía no es por él, lo fue en un principio, pero dejó de serlo cuando me dí cuenta de que el problema soy yo.
Yo, una persona que jamás pensó en sí misma como alguien maravilloso.
Una persona que se escondía o huía cuando las cosas se ponían feas.
Una persona hecha para sobrevivir a los problemas, para sobrellevarlos ella sola.
Para sufrir en silencio.
La muy ingenua pensó que después de la gran ruptura podría levantar cabeza, hacer entender a su nuevo círculo de amigos que era otro tipo de persona.
Alguien fuerte, extrovertida, divertida, cariñosa y comprensiva.
Alguien que sabía divertirse pero que podía llevar hacia delante todo lo relacionado con los estudios. Alguien que aunque hubiese tenido un mal día siempre podía dedicar su mejor sonrisa. Alguien que llevara una relación sana con su familia.
Alguien que se quisiera.
Pero lo que ella no sabe es que algún día, esa máscara tan bonita que se había montado se iba a caer, e iba a ver cómo se caía, se rompía en mil pedazos y todo su círculo de seres queridos lo veían con ella.
Y lo sé, soy consciente. Ese día llegará.
Verán a mis propios demonios reconcomiéndome viva. Verán cómo lo más oscuro de mí acaba conmigo. Y les decepcionaré.
Sí, justo como me ha dicho hoy mi querida progenitora.
Pues vé, vé e intenta que mi hermano sea mejor persona que yo, alguien fuerte, que pueda con todo, y no sea tan cobarde e inútil como yo. Y sino, siempre puedes irte, ¿verdad?
Justo como me has dicho hoy antes de irte a trabajar.
Justo después de que por culpa de mi inutilidad provocara una pelea contigo y con papá.
Justo después de que me sintiera como la peor mierda jamás cagada de la historia y decidiera escribir esta entrada, ya que es lo más parecido a un confidente que voy a tener en la vida.

lunes, 23 de mayo de 2011

Life.



Chicos, la vida da muchas vueltas.


Veréis, hace dos años, cuando empecé a salir con Dani, yo tan sólo tenía una buena amiga,Blanca; era la persona más antitabaquista y anti-alcohol que os podíais echar a la cara; y además era muy inocente en cuanto a temas sexuales.

Blanca, por aquel entonces, era una persona.. lo dejamos en promiscua xD, y gracias a ella conocí a mi otra mejor amiga, Mari Pili (sé que le da coraje que la llame así.. me da igual xD).

Pili se pasaba toooodo el día hablando de lo geniales que eran sus mejores amigos Ota y Evan, que por aquel entonces estaban saliendo. Y fumaba, bebía y follaba como una cosaca, lo que chocaba contra mi forma de pensar.


Hace dos años, conocí a Carmen y a Raúl, que eran por aquel entonces mis modelos a seguir en cuanto a noviazgos.

Conocí también a Julia, Lola, Nando (con Nando quiero hacer un paréntesis, porque a pesar de como cambian las cosas, los cabrones simpáticos jamás dejarán de ser cabrones) y más gente que, para mí, era con las que me sentía agusto, como en casa.


Y chicos, hoy, después de dos años,, he conocido a infinidad de gente nueva, gente que se quedó en el camino, y gente con la que aún tengo relación; fumo cachimba y bebo alcohol; y hace dos días perdí la virginidad.

Blanca tiene una relación estable desde hace casi diez meses con un chico que conoció en un crucero; Marcos, que se convirtió también en un buen amigo mío.

Pili, aparte de seguir fumando, bebiendo y follando como una cosaca, está de rollo con Evan desde hace tres meses.

Hace un año que Carmen y Raúl lo dejaron (éste último con infinidad de relaciones posteriores que no quedaron muy bien paradas).

Y hoy en día, mi novio y mis mejores amigos siguen aqui conmigo, a las duras y a las maduras.




Con ésto, quiero demostraros que la vida cambia, y que muchas veces no como nos gustaría.

Pero lo que he aprendido en estos dos últimos años es que las cosas realmente importantes son las que permanecen.



Y eso.. es genial :)



martes, 19 de abril de 2011

La inocencia de los colores, sabores y olores de la niñez desaparecen en la oscuridad de la razón. (El dibujo es mío ^^)

Vacía..

Te sientes vacía.. ¿Qué te pasa? ¿Ni siquiera tus amigos pueden aliviar tu vacío?
No, ni siquiera ellos..
Ellos sólo me distraen durante unas horas y hacen que me sienta mejor,
pero cuando se van vuelve esa sensación..
Lo que más miedo me da es que ni siquiera él puede matarla.
Tan sólo la mitiga unas horas, pero cuando se va, vuelve.
¿Y sabes por qué?
Porque tengo miedo de estar sola, porque no me soporto.
Ni un solo minuto.
Tengo que distraerme con cualquier cosa, dibujar, leer, y en casos de extrema desesperación..
estudiar..
Pero eso muchas veces no sirve de nada.
Necesito estar acompañada para olvidarme un rato de que dentro de unas horas tendré que ducharme y enfrentarme a mi lucha diaria contra el espejo.
Pero el espejo no tiene la culpa.. soy yo la que no me soporto.
Él solo refleja lo que ve, es sólo cristal.
Refleja el odio que tengo hacia mí misma.
Es muy triste.. ¿sabéis por qué?
Porque el amor que mi mente necesita, lo tengo que conseguir de los demás, de ahí mi sensación de vacío cuando estoy sola..
Porque ese amor debería proporcionármelo yo misma y no soy capáz..

lunes, 11 de abril de 2011


Es una putada, una auténtica putada.

El mirarte al espejo y lo único que sientes es asco.

El no valorarte nada en ningún sentido porque creesque cualquiera es mejor que tú.

No puedes soportar que alguien se meta contigo, porque te hundesen la miseria y piensas:

"¿por qué no puedo ser mejor?"

Pero sabes que eso es imposible, no vas a cambiar.

Vas a seguir siendo la misma persona, te guste o no te guste.

Vas a seguir siendo Pili, con todo lo que eso conlleva.

Así que jódete y aguántate.